Mª Ángeles Femenías / MÁLAGA

Frigiliana es un municipio de la Axarquia malagueña entre el mar y la sierra. Pasear por sus calles es transportarse a otra época y envolverse en pureza por el blanco de sus casas. Sus calles empedradas llenas de cuestas hace recordar al viajero que utilice un calzado cómodo si quiere disfrutar del entorno.

Pero cualquier sufrimiento es bueno, si más tarde llega la recompensa, así que todo merece la pena cuando se acerca la hora del aperitivo. Sentarse en una de sus terrazas  para disfrutar de su maravillosa gastronomía local, y a la vez, sentirse privilegiado de contemplar semejante paisaje: unas vista de ensueño que terminan, a lo lejos, en el horizonte.

Pero sin duda, lo mejor es cuando llegan las viandas. El choto, las migas de harina, los potajes de Semana Santa a base de bacalao, y  las tortillitas de huevo y harina con el toque de la miel de caña de esta tierra, pues son manjares que no pueden faltar en la mesa.

Nadie puede irse de Frigiliana sin visitar sus bodegas y comprar, al menos, una botella de su exquisito vino dulce, o algun recuerdo de artesanía que elaboran con un cariño singular.

Si lo que se pretende es pasarlo bien, las fiestas este municipio son ideales para ello. Nada más empezar el año se celebra la Festividad del Santo Patrón San Sebastián; un mes más tarde, llega el jolgorio de los carnavales, y casi inadvertida, casi a punto de llegar la primavera,  es cuando las calles se inundan de profundo respeto con la Semana Santa. Ya en mayo, el pueblo se viste  de flores con sus cruces, y con la llegada del calor en junio, llega la festividad de  San Antonio de Padua.

Además de las fiestas populares, Frigiliana acoge el Festival de las Tres Culturas, un evento en el que la cultura árabe, judía y cristiana realiza una serie de actividades conjuntas, que fomenta la convivencia entre los vecinos y visitantes. Otra cita ineludible es el festival internacional de Danza oriental y étnica”Bailando sueños “, donde se pretende evocar el sueño de cuando se es niño.

Los apasionados de los caballos también tienen cita con el pueblo de Frigiliana, ya que durante el año se celebran numerosas exhibiciones ecuestres en las que se puede disfrutar de la doma vaquera o de la alta escuela.

Pero para quienes deseen mover el cuerpo, Frigiliana también prepara cada año un festival de bailes populares acompañado de los coros del lugar, y en septiembre,  la festividad de las Candelarias, donde hay una muestra de canciones populares al compás de almirez y zambomba.